leíimos los alumnos de lógica y yo el mismo fragmento del banquete que estoy leyendo con los de sexto. En función de un ejercicio didáctico, pero también catártico, en donde me iluminaron con la grandeza de establecer la diferencia entre amor y obsesión e hicieron poesía de verdad.
Los de sexto fueron sozos... pero a decir verdad tampoco necesitaba la gran iluminación. Hace unos cuantos post no mentía, pero ahora sé que mi felicidad es mia y punto, así se caiga el mundo y sólo lo mio permanezca.. es mio... no pende ni depende de nadie más. Y confirmado dos posts siguiente si, es cierto, soy una egoísta de a ratos... pero sólo de a ratos.
A instantes, cada vez más largos y cada vez más constantes... soy feliz, no porque esté o no esté, porque estés o no estés, no porque digan o no digan, no por lo que pasa o no pasa... sino porque pasa lo que pasa y sigue pasando. La felicidad... al final es cuestión de decisión propia personalmente de mi misma (jojojo).
Repito pasa lo que pasa y sigue pasando.
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